Tráfico de especies

Todos los días escuchamos en las noticias sobre incautaciones de drogas, o decomisos de armas, pero muy pocas veces sobre el decomiso de flora y fauna silvestres. Que según fuentes oficiales (SEMARNAT) después del tráfico de armas y de drogas, es la actividad ilícita más importante en algunos países sudamericanos, centroamericanos y por supuesto México. El tráfico de fauna silvestre es uno de los delitos que más auge ha tomado a nivel internacional, mueve grandes cantidades de dinero a nivel mundial, siendo obviamente países como México, uno de los principales abastecedores de este mercado. En el caso concreto de nuestro país, que alberga casi el 8% de la biodiversidad de todo el mundo, la situación se vuelve alarmante. Las redes de distribución cuentan con grandes recursos, tanto económicos como humanos para llevar acabo sus actividades ilícitas.

Su manera de operar es similar a la del narcotráfico, su base de trabajo comienza con los recolectores, habitantes de las distintas regiones, campesinos, indígenas etc., que conocen bien los lugares, los ciclos reproductivos de las especies, o sus habitad naturales; pero que la mayor de las veces desconocen la naturaleza delictiva de los encargos, por los que además reciben sumas muy bajas de dinero. Luego están los grupos que se encargan de transportar las especies lo más cerca posible a las grandes ciudades. Es ahí donde operan los grupos de comercialización, que son los encargados de contactar y ampliar los nichos de mercado, tanto en el país, como en el extranjero.

A finales del año pasado la Unión Internacional para la Conservación de la naturaleza, dio a conocer que en México, existen cerca de novecientas especies en peligro, ó amenazadas. Por esa razón el tráfico ilegal de fauna es que se convierte  en una verdadera amenaza, para la conservación de las especies dentro del país. Además de las repercusiones que para el resto del mundo puede significar el tráfico y pérdida de estos animales. Todo esto sin mencionar de los riesgos de enfermedades zoo noticas que esto puede acarrear.

Ecoturismo de observación

El ecoturismo de observación de aves silvestres, es una industria bien desarrollada en muchos países del mundo, que al año llegan a ganar muchos millones de dólares únicamente por este concepto. Sin embargo esto no sucede con México, a pesar de poseer una de las mayores variedades de especies endémicas, y de ser vecinos del principal proveedor de ecoturistas en el mundo. En México se tienen aves silvestres en casi todo el territorio, pero principalmente en algunos estados como Oaxaca, Chiapas, Veracruz y Puebla. La observación de aves es una actividad ecoturística que se lleva acabo, con varios propósitos, como son el disfrutar de la naturaleza mediante el uso de cámaras, binoculares etc., ó la observación con fines de investigación. Se estima que solamente en los Estados Unidos los observadores de aves sumaron 82 millones de personas, de los cuales 9.8 millones viajarían para a otros países para ver aves silvestres. Esta cantidad de observadores dejaron una derrama económica en EUA de 35 mil millones de dólares entre los años 2007 y 2010, convirtiendo a la actividad en una mega industria. (Cifras obtenidas por las organizaciones ambientalistas Defenders of Wildlife de México, y Teyeliz A.C.)  

Otros países como Ecuador, Perú, Colombia y Brasil, ya están desarrollando proyectos ecoturisticos en base a la observación de especies; en México no. Lamentable, aun cuando en el país, existen alrededor de 1100 especies de aves silvestres, que representan el 11% del total de aves en todo el planeta, lo que ubica a México en el quinto lugar del mundo, y segundo en el continente, solo por debajo de Brasil.

Ojala que muy pronto se pudiera desarrollar algún proyecto de esta naturaleza en nuestro país.

MEXICO, CULTURA Y ENERGIA

Entre las tantas consecuencias de la situacion catastrofica de Fukushima, Japon posterior al sismo, aparece la imperiosa necesidad de las sociedades en los diferentes paises, de hacer todo lo posible por frenar el desarrollo de las plantas que utilizan la energia nuclear para producir energia. Desde mi perspectiva al igualque la de muchos incluyendo gente que ha pasado su vida trabajando en el area, no es aceptable el nivel de riesgo que ofrece una industria de este tipo, no solo por lo que puede suceder, como en Japon, cuando todas las previsiones no evitan el accidente, si no por el gran problema que implica, por ejemplo, el control de los deshechos radiactivos "normales", desechos que se van almacenando en tumbas radioactivas y que se les dejan a las generaciones por venir, al fin que despues, cuando aparezcan los problemas debidos a cambios geologicos, modificaciones climaticas, errores de clalculo,etc. ya no estaran los responsables, habran obtenidos sus ganancias, las habran gastado, y quizas, habran muerto. Entonces, ¿a quien habra que responsabilizar?. Ahora imaginemos Mexico, el Mexico de hoy, con indices de corrupcion increiblemente altos, donde todos sabemos y experimentamos diariamente la negligencia con que se menejan las instituciones, el poco cumplimiento de reglementos y la casi nula practica etica, un pais gobernado por politicos cinicamente corruptos e ineptos donde los niveles de educacion caen gravemente, donde los negocios legales e ilegales dictan cada vez mas los principios de la sociedad, todo esto en contraste con la sociedad japonesa que no ha hecho fama por su irresponsabilidad, por su bajo nivel educativo o sus carencias tecnologicas y donde precisamente a estas horas, continuan tratando de acotar el efecto de la catastrofe nuclear. Entonces, tratando de no voltear la cara para otro lado, ¿que podriamos esperar si algo sucediera en Laguna Verde, Veracruz?, ¿por que tendriamos que pensar que nosotros estamos exentos del peligro, si a los japoneses la prevision no los preservo de la catastrofe?


Autor: Ruslan Bustamante.